“No tengas miedo”

Caro, 31 años, San Juan capital, San Juan.

Quería contarles mi experiencia, de cómo fue realizar mi procedimiento en medio de ésta pandemia. 

Me enteré de mi embarazo cuando tenía alrededor de 4 semanas, soy muy regular y apenas noté la ausencia de mi regla, me di cuenta de que las cosas no andaban bien.

Había tenido una relación, no cuidada, con una persona que no era mi pareja estable. Yo no estaba utilizando métodos anticonceptivos (de inconsciente) y él creyéndose muy vivo me dijo «hagámoslo así, no pasa nada». Yo me dejé llevar, lo cual me llevó al resultado menos deseado: un embarazo.

Me realicé el test, que dio positivo y entré en pánico, no sabía qué hacer. Ese embarazo no podía llegar a término. Le conté a la persona con la que había estado y se desentendió del tema, absolutamente. Me sentí tan mal, cómo nunca antes… 

Hablé con mis amigas y encontré diferentes posturas, a favor y en contra del aborto, me contaban experiencias de otras chicas que pasaron por mi situación, pero todas eran desde un punto de vista del sufrimiento, de consecuencias terribles. Tuve mucho miedo. Incluso me llegué a sentir una mierda de persona por no querer tenerlo. Pero no era el momento, no tenía los medios para afrontar el embarazo, mi situación es muy precaria económicamente. Así que me armé de valor y empecé a buscar por internet algún tipo de ayuda, encontré el 0800 de educación sexual del gobierno, los médicos en red y Las Hilarias. 

De todo recibí excelente trato, y una respuesta realmente rápida. 

Las chicas de Las Hilarias me trataron súper bien, todo lo realizamos a través de llamadas telefónicas, ya que no estaba permitido juntarnos. Empecé a tratar con la chica que iba a ser mi acompañante en este proceso, y me sentí escuchada, comprendida, siempre una palabra de aliento. Me brindó toda la información que necesitaba con una paciencia increíble, ya que yo hacía mil preguntas, estaba muy angustiada y ansiosa. 

En la semana 6 visité a la ginecóloga, quien me orientó en cómo tenía que hacer el procedimiento, también me derivó a una psicóloga y una asistente social. Todo salió bien, después de firmar el consentimiento, obtuve las pastillas.

Realicé el procedimiento, y todo fue tan rápido, que apenas noté que ya había pasado todo. Obviamente, sentí incomodidad y dolores similares a los de la menstruación, tuve un poco de fiebre, pero nada más. Inmensamente sentí como mi cuerpo volvió a la normalidad. 

Pensé que iba a ser más difícil psicológicamente afrontarlo, pero al estar convencida de que fue lo mejor, me quedo tranquila. 

Hice mi control post aborto, y elegí un método anticonceptivo para cuidarme. 

Si lees esto y estás atravesando por un embarazo no deseado, y te encontrás dentro de las semanas en las que es posible realizar la ILE, no tengas miedo, comunicate con las chicas o con el 0800, o con los médicos en Red, vas a ser escuchada y vas a recibir ayuda! 

No tengas miedo.

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